miércoles, 8 de mayo de 2013

Nuevos paradigmas, nuevos escenarios

Dice Laborit: “Si en un organismo no existen jerarquías, no existe relación de dominio, es porque cada célula, cada órgano, cada sistema, realiza una función cuya finalidad es participar en la conservación de la estructura del conjunto, sin la cual ningún nivel de organización, del más simple al más complejo, podría sobrevivir” (10). A diferencia de la organización jerárquica vertical por la que circulan las órdenes, en el mundo orgánico circulan los avisos y las señales, según establecido en su propia formación en el proceso evolutivo. Este tipo de organización, sin jerarquización a pesar de su increíble diversidad y complejidad, se ha llamado sinergia (12), y ha sido posible en una larga evolución de procesos de simbiogénesis.
Así pues la cooperación no es un principio ético o político, es un principio orgánico. Es un principio ético en la medida en que es necesario que la cultura no vaya contra natura.



Los estímulos que hoy en día están fuera de la sala de clases desafían las tradicionales estrategias pedagógicas, en cuanto a la motivación que genera en las y los estudiantes. Es por ello que las y los docentes nos encontramos en nuevos escenarios educativos que piden a gritos implementar necesariamente cambios curriculares en lo que atañe a nuestras prácticas, re-pensando la planificación, evaluación y criterios de selección de recursos pedagógicos.
Una mayor inserción de TIC’s en las aulas escolares de nuestro país nos plantea como objetivo  llevar a  clases componentes digital y visualmente atractivos, alineados con los objetivos pedagógicos que orientan la labor y a la vez, empoderarnos de los recursos y tecnologías existentes
Es innegable que esta  revolución tecnológica ha cambiado los modelos de desarrollo organizacional de las instituciones educativas a través de un nuevo enfoque curricular que demanda la participación, el involucramiento y también la interrelación entre todos los implicados. Nuevos paradigmas y desafíos para la construcción y socialización del conocimiento abren nuevas preguntas y habilitan recorridos distintos en la interacción, colaboración y comunicación, basándose en la generación de climas cálidos y propicios para el aprendizaje, donde se desarrollen además, habilidades como  la responsabilidad por las acciones individuales, el respeto por los aportes de todos y un fuerte compromiso con el objetivo común.
El aprendizaje colaborativo y las Tecnologías de la Información y la Comunicación constituyen un marco apropiado de posibilidades.  El clima que propicia el aprendizaje colaborativo se establece a través de la necesidad de explicarle a otros las ideas propias de forma concreta y precisa, escuchar, aceptar y considerar diversas inquietudes, puntos de vista y reflexiones; compartir la autoridad, la responsabilidad y y  establecer consenso con los demás.
“La investigación demuestra que mediante el aprendizaje colaborativo los estudiantes pueden tener más éxito que el propio profesor para hacer entender ciertos conceptos a sus compañeros. La razón de este hecho estriba en que los compañeros están más cerca entre sí por lo que respecta a su desarrollo cognitivo y a la experiencia en la materia de estudio, de esta forma no sólo el compañero que aprende se beneficia de la experiencia, sino también el estudiante que explica la materia a sus compañeros consigue una mayor comprensión.
Parafraseando a Jonson, el aprendizaje colaborativo constituye un sistema de interacciones cuidadosamente diseñado que organiza e induce la influencia recíproca entre los integrantes de un equipo y se desarrolla a través de un proceso gradual en el que cada miembro se siente mutuamente comprometido con el aprendizaje de los demás generando una interdependencia positiva que no implique competencia.”


Si se complementa convenientemente con la utilización de la tecnología informática. La utilización de grupos colaborativos heterogéneos, en clase, es un mecanismo ideal para aprovechar el potencial del aprendizaje entre compañeras/os.
“El aprendizaje colaborativo en el ámbito educativo potencia: la construcción de una cultura de colaboración entre profesores, estudiantes y grupos que constituye un nuevo modo de pensar, de hacer, a la par de desarrollar capacidad de identificar un proyecto común, el diseño de proyectos con un mayor nivel de participación, el reconocimiento del valor de las aportaciones de los demás, así como compartir pensamientos, valores, procesos y estilos de acción colaborativo”.

¿Cuáles son las similitudes y diferencias entre dos términos que se utilizan indistintamente como sinónimos y no lo son: aprendizaje colaborativo y aprendizaje cooperativo? 
A continuación se muestra una tabla comparativa


3 comentarios:

  1. Hola Carola, me pareció muy interesante tu manera de entender cómo la web 2.0 puede revolucionar la educación actual. Lo que no dejo de preguntarme es si en nuestra provincia están las condiciones dadas para recibir este nuevo paradigma. Saludos...

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  2. Caro, que bueno.......me gusto el video.

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  3. Carola muy interesante esta entrada!!! Comparto tus aportes en relación al nuevo paradigma educativo y las posibilidades que se abren para enseñar y para aprender.

    Deberemos poder des-aprender ese paradigma que vivimos durante nuestro recorrido de formación para poder aprender estas otras maneras de estar.

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